Elaboración y gestión de instrumentos de planeamiento

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Para elaborar un instrumento de planeamiento urbano, es importante tomar en cuenta las diferentes fases y pasos administrativos que se deben cumplir. Lo mismo ocurre al momento de gestionarlo, pues existen una serie de normas destinadas a preservar el bienestar común. Estas normas regulan todo lo concerniente a territorio y urbanismo e intentan lograr el equilibrio entre el espacio común que ocupan los ciudadanos.

Por lo tanto, elaborar y gestionar este tipo de instrumentos, implica la aplicación de conceptos complejos, los cuales serán explicados detalladamente en el presente artículo.

¿Qué es un instrumento de planeamiento?

Es un documento cuyo fin es autorizar las construcciones que se harán en los espacios urbanos. Para que este tipo de documentación sea emitida positivamente, hace falta que se cumplan ciertas condiciones como, por ejemplo, entregar una propuesta concreta acerca de lo que se realizará. Por otra parte se tomará en cuenta que no todos los procesos para emitir esta permisología serán iguales.

De esta forma según las condiciones particulares del caso, puede ser exigido que los instrumentos de planeamiento se hagan sobre una cartografía específica y no en otra. Sin embargo en la mayoría de las situaciones, serán solicitados los informes respectivos, los cuales suelen entregarse al inicio y a final de la obra a construir.

De este modo, se toman en cuenta las características del suelo y de la obra que se propone levantar, así como la legislación vigente y las propias condiciones de la urbanización en donde se edificará. Es por ello que, tanto los organismos públicos como los particulares, cuentan con una base clara sobre la cual establecer sus proyectos. Asimismo, se podrá garantizar el equilibrio medio ambiental y urbanístico.

¿Para qué sirve un instrumento de planeamiento?

Con este tipo de regulaciones, se pretende mantener el orden dentro de los espacios comunes de la ciudad o localidad. También se procura proteger a la naturaleza evitando que destruyan bosques y otros espacios naturales. Además se resguarda a los ciudadanos de posibles embates y abusos, generados por construcciones inadecuadas.

De la misma forma, sirven para que los propietarios (ya sean organismos de la administración pública, empresarios privados o particulares), conozcan sus derechos y deberes en cuanto al uso del suelo y del territorio en general. Esto, siguiendo el estatuto de la propiedad inmobiliaria que rija en cada localidad, según sea requerido.

Por lo tanto, todo instrumento de planeación, sirve para que los espacios públicos de uso común, se mantengan normados, con la intención de garantizar la seguridad de los ciudadanos. Al mismo tiempo, funcionan para que los espacios urbanísticos contribuyan al bienestar social, manteniendo lugares destinados al esparcimiento y al correcto desarrollo de la sociedad.

¿Cómo se debe elaborar un instrumento de planeamiento?

Existen diferentes maneras para elaborarlo, no obstante, lo principal es tomar en cuenta el sistema de reparto competencial de territorio, entre el Estado y las Comunidades Autónomas. Esto, junto a las normas establecidas por el ayuntamiento, sobre el contenido que se debe encontrar en la documentación.

Ahora bien, el modo más utilizado y conocido es el Plan General de Ordenación Urbana, el cual engloba toda la terminología municipal. Actualmente se desdobla en dos formas de implementarse, siendo la primera de ellas La Ordenación Estructural y la segunda es la Pormenorizada. Es muy importante conocer esta diferencia, pues de ello dependerá el tipo de permiso que se debe solicitar.

Por ello, hay que tener en cuenta que el Ordenamiento Estructural incluye la descripción del suelo, en cuanto a sí es urbanizable o no. También se deberá describir la sectorización básica del municipio, junto a la red básica de servicios y dotaciones. Por su parte, la Ordenación Pormenorizada, debe contener clasificación concreta de los terrenos, y la red secundaria de cada servicio y dotación.

En cuanto a los espacios municipales, suelen realizarse Planes Parciales según los lineamientos interiores para reformas. Dentro de los planes Macros que incluya el interés supramunicipal, se consideran las características específicas que pueden influir, como por ejemplo lo relativo al levantamiento de huertas y al análisis de los riesgos de inundación.

¿Cuáles son los tipos de planeamiento urbano en Madrid?

Existen diferentes clases y su clasificación depende del objetivo que se quiere lograr. En este sentido, el instrumento de Ordenación Urbanística general, a su vez se clasifica en el Plan General Municipal, el Básico Municipal e Intermunicipal.

Dentro de los instrumentos de ordenación urbanística detallada, se encuentran los planes de Ordenación Urbana, los Parciales de Ordenación y de Reforma Interior. Asimismo se incluye en esta categoría, a los Estudios de Ordenación junto a cada plan Especial, que sea necesario diseñar.

Ahora bien, es importante resaltar que los instrumentos de ordenación urbanística generales, son los que se solicitan con mayor frecuencia. Es así, debido a que responden a la mayoría de las necesidades de quienes van a modificar un espacio urbanístico. A su vez, incluyen las exigencias impuestas por parte de las autoridades, en cuanto al cumplimiento de las regulaciones establecidas.

Este instrumento, aclara cómo se puede usar el suelo y también, cómo debería ser la estructura urbana, para preservar el territorio de cada municipio. De la misma manera, contempla la forma en la cual se deberá constituir cada espacio público, considerando lugares para el esparcimiento social y sitios que requieran de protección,  por poseer un valor histórico particular.

¿Qué importancia tienen los instrumentos de planeamiento urbano?

Son importantes, ya que sin ellos, las ciudades, pueblos y comunidades carecerían de organización. Esto traería como consecuencia la imposibilidad de convivir en sociedad de una manera ordenada y productiva.

Además, el control y el orden que se han establecido, van en miras de garantizarle a todos los ciudadanos vivir en un entorno común, que resulte seguro y equilibrado para todos. Lo cual incluye la protección a los suelos, en cuanto a su uso y limitaciones de explotación para construcciones no adecuadas.

También es importante considerar el resguardo a los recursos naturales y la protección de cada espacio que tenga interés cultural o valor histórico. Por tal motivo, lo mejor es consultar con un abogado especializado en urbanismo.